Powered By Blogger

viernes, 7 de septiembre de 2012

Guerra de Malvinas

La Guerra de las Malvinas o Guerra del Atlántico Sur  fue un conflicto bélico entre la República Argentina y el Reino Unido que tuvo lugar en las islas Malvinas, Georgias del Sur y Sándwich del Sur. La guerra se desarrolló entre el 2 de abril, día del desembarco argentino en las islas, y el 14 de junio de 1982, fecha del cese de hostilidades entre la Argentina y el Reino Unido de la Gran Bretaña, lo que involucró la reocupación de los tres archipiélagos por parte del Reino Unido.

La causa fue el intento por parte de la Dictadura Argentina de forzar mediante una acción militar la búsqueda de solución, favorable a sus intereses, en el diferendo sobre la soberanía de estos archipiélagos equinocciales, los cuales las Naciones Unidas consideran territorios en litigio entre la Argentina y el Reino Unido, este los administra y explota. Sus descubrimientos son motivo de controversias; fueron ocupados alternadamente entre España, Francia, Argentina y Reino Unido (actualmente); Argentina considera que se encuentran ocupados por una potencia invasora y los consideran como parte de suprovincia de Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur. El saldo final de la guerra en vidas humanas fue de 649 militares argentinos, 255 británicos y 3 civiles isleños.
Políticamente, la derrota en el conflicto precipitó en Argentina la caída de la llamada Junta Militar que gobernaba el país. Fue reemplazada en 1983 por un gobierno elegido, el cual facilitó la firma del Tratado de Paz y Amistad entre Argentina y Chile de 1984, con el cual se puso fin al conflicto del Beagle, y con ello posiblemente, el cese de un eventual nuevo intento de solución bélica por parte de las fuerzas argentinas también para ese problema limítrofe.
En el Reino Unido, por su parte, la victoria en el enfrentamiento ayudó a que el gobierno conservador neoliberal de Margaret Thatcher saliera reelecta en las elecciones del año 1983.
Luego de más de tres décadas de acaecido el conflicto, las Naciones Unidas continúan considerando los tres archipiélagos con sus aguas circundantes como territorios con soberanía aún no definida, entre la Argentina y el Reino Unido.
 comienzos de los años 1980, el modelo económico neoliberal impuesto a sangre y fuego por el autodenominado Proceso de Reorganización Nacional dio claras muestras de agotamiento, lo que provocó numerosas tensiones sociales: 90% de inflación anual, recesión profunda, interrupción de buena parte de la actividad económica, generalización del IVA, empobrecimiento de las clases medias, brusco aumento del endeudamiento externo de las empresas y del Estado, salario real cada vez más depreciado, aumento de la pobreza, etc.
Después de los cambios de poder de la junta militar a finales de marzo de 1981, Leopoldo Galtieri llegó al poder, en diciembre de ese año, con el Brigadier Basilio Lami Dozo y el almirante Jorge Anaya reemplazando a Roberto Viola luego de que éste reemplazara aJorge Rafael VidelaAnaya propuso la recuperación por vía de la acción militar de las Malvinas como solución al largo conflicto por la soberanía de las islas. Entre otras varias razones, tanto por el efecto que podría conseguirse a la hora de desviar la atención social de esos problemas, como por las posibilidades de recuperar el crédito perdido entre determinados sectores sociales sensibles a una acción de interés patriótico como ésa. El periódico La Prensa especuló que sería un plan a efectuarse paso a paso, comenzando con cortar el suministro a las islas, y que terminaría en acciones directas hacia fines de 1982, si las conversaciones en la ONU fueran infructuosas. La decisión fue tomada bajo la suposición de que el Reino Unido nunca respondería militarmente.
La tensión entre los dos países se incrementó el 19 de marzo de 1982 cuando un grupo de comerciantes de chatarra argentinos levantaron la bandera de Argentina en la Isla de Georgia del Sur, este acto fue más tarde visto por los Ingleses como el primer acto de guerra. La nave HMS HMS Endurance fue enviada desde el puerto de Stanley hacia la isla, hecho que llevó a la invasión argentina de la isla. La junta comenzó a estudiar la posibilidad de ocupar las Islas Malvinas y Georgias antes de que los británicos pudieran reforzarlas, por lo tanto aceleró la fecha de la invasión hacia el 2 de Abril.
A pesar de las múltiples advertencias del capitán de la marina Nicholas Barker, la invasión de las islas tomó por sorpresa al Reino Unido. Barker creía que la planeada de la retirada del HMS Endurance, que era la única nave inglesa en el Atlántico Sur, sería la chispa que precipitaría la invasión siendo para los argentinos una señal de que Gran Bretaña no estaba dispuesta, y pronto sería incapaz, para defender sus territorios y súbditos en las Malvinas.

Tipos de noticias en la Guerra de las Malvinas

  • Las noticias militares son las que narran la guerra desde el punto de vista estrictamente militar. Son expresadas por medio de comunicados y declaraciones, y sus fuentes de información son institucionales. En ellas se relata, por ejemplo, el desplazamiento de tropas, posiciones de guerra, estrategias, etc.
  • Las noticias políticas comprenden acciones políticas, declaraciones y decisiones emanadas de la Junta Militar. En este escenario interactúan los militares, políticos y empresarios.
  • Las noticias diplomáticas son específicas y se dan en el espacio que se delimita entre el Ministerio de Relaciones Exteriores argentino y de las Organización de las Naciones Unidas. Se dan por medio de declaraciones, entrevistas y citaciones, y su fuente es institucional.
  • Las noticias del mundo anglosajón son las que toman la guerra desde el punto de vista británico. Lo mismo sucede con las noticias desde el punto de vista estadounidense.
  • Las noticias económicas se refieren a las sanciones de la Comunidad Europea contra la economía argentina.
  • Las noticias históricas fueron publicadas principalmente en las primeras semanas del conflicto; consisten en narraciones cronológicas, grandes síntesis, antecedentes y explicación causal de la guerra.
  • Las noticias cotidianas ofrecen al lector narraciones pintorescas. Por ejemplo, cómo es un día en las Islas. Acercan las imágenes de una media lejana para un lector que nunca estuvo en las Islas. Sus personajes pertenecen al mundo privado.
  • Las noticias de la Iglesia católica adquieren una gran importancia con la llegada del Papa Juan Pablo II a Argentina. Constan de narraciones, declaraciones y documentos, y sus fuentes son institucionales.
  • Las noticias de opinión describen las relaciones de causa/efecto del conflicto. Son jerárquicas e interpretativas, y están presentes al inicio y al final de la guerra.
  • Las noticias sobre otros medios son las que publican opiniones y reacciones de la prensa británica, los problemas de la censura, la contrainformación y los rumores. Su fuente de información son los diarios británicos.

Consecuencias de la guerra

Los efectos de la guerra de Malvinas fueron de lo más variado. Una de las cuestiones de mayor peso ha sido la vuelta a la democracia en la República Argentina en 1983. Particularmente, algunos especialistas como M. Korstanje y George, B sugieren que el discurso político de Malvinas como un arquetipo sagrado se corresponde con un bajo interes por parte de la ciudadanía en visitar las islas. De forma similar a los centros ejemplares no masivos, Malvinas representa un aspecto y recordatorio importantes para la vida democrática de Argentina. Su accesibilidad se encuentra vedada para continuar en el imaginario colectivo como una narrativa nacionalista que confiera indentidad y sentido en momentos de incertidumbre. En forma similar, a los cuentos o los mitos, Malvinas es una gran meta-narrativa que ejemplifica una moraleja, un mensaje, una enseñanza siempre acorde a los gobiernos que se van sucediendo. Más allá de la explotación, Malvinas evoca un conflicto que se puede estructurar en tres ejes fundamentales: a) la reivindicación del derecho del más fuerte propia de Occidente en donde una guerra connota ocupación efectiva, b) la negativa británica a cumplir las reglamentaciones internacionales, y c) la lucha por los recursos enérgeticos.


He aquí algunos testimonios de lo que fue esta guerra realmente para el pueblo argentino y las personas que estuvieron en ella:


El protagonista de esta historia es el Suboficial Mayor Buzo Táctico (RE) Pedro C. López, retirado de la fuerza hace apenas dos años y dos meses. Un salteño “macanudo” de 54 años de edad y 35 de orgullosos servicio en la Armada. El destino lo señaló para formar parte de la patrulla combinada, que comandada por el capitán Giachino tomaría la casa del gobernador en Puerto Argentino, en la madrugada de aquel 2 de abril de 1982. Al respecto nos cuenta:
“... – Me acuerdo como si fuera hoy, era la tardecita del 26 de marzo de 1982, el entonces teniente de corbeta Diego García Quiroga había  reunido con nuestro comandante, el capitán de corbeta Alfredo Raúl Cufré. Vino y sin mucho preámbulo nos dijo que él y siete de nosotros partiríamos a las 23 hs. con destino a  Puerto Belgrano. Allí nos reuniríamos con otros siete Comandos Anfibios de la Infantería de Marina y quedaríamos a las órdenes del capitán de corbeta Pedro E. Giachino.-
Seleccionamos el armamento y el , el teniente García Quiroga había elegido una ametralladora “Halcón”, nosotros nos equipamos con el “F.A.L. Para” un arma diseñada especialmente para este  de operaciones y realmente nos fue muy útil.-
Fuimos embarcados y el día 28 de marzo zarpamos desde Puerto Belgrano en el destructor “ARA Santísima Trinidad”.-
Ya en plena navegación, el día 30 nos reunió el capitán Giachino, nos dio las primeras instrucciones y brindó  de la operación.-
La patrulla se llamaría “TECHO”. En total éramos 16 integrantes, 8 Comandos Anfibios y 8 Buzos Tácticos. Nos desplazaríamos formando cuatro grupos: “Rojo”, en el bote Nº18, con el capitán Giachino y los cabos Flores, Ortíz y Vargas, “Naranja”, en el bote Nº19, con el teniente de fragata Gustavo Lugo, el subocial salas, yo y el cabo Ledesma, “Verde”, en el bote Nº20, con el teniente García Quiroga, el subocial Castillo y los cabos Gómez y Urbina, por último, “Azul” en el bote Nº21, con el teniente de fragata Eduardo Alvarez, los suboficiales Mansilla, Gutiérrez y el cabo Vargas.-
Repasamos la misión una y otra vez, “Rojo” tomaría la comisaría, “Verde” la usina, apoyados por “Naranja”, para luego ambos dar apoyo a “Rojo” y tomar la central telefónica. Por otra parte, “Azul” debía neutralizar un campo de antenas antes de llegar a Puerto Stanley.-“
Nos sigue relatando el suboficial mayor López : “... – Recuerdo que era cerca de las siete de la tarde del día primero de abril, salí a cubierta y alcancé a ver las islas recortadas en el horizonte. Un escalofrío recorrió todo mi cuerpo, me asaltaban dudas..., ¿lo haríamos, o se cancelaría todo a último momento, como en diciembre del ’78 cuando la crisis del Canal Beagle?. Nos avisaron que era el turno de “rancho”. Antes de la cena nos avisaron de un cambio de planes, debíamos tomar la casa del gobernador y lograr su rendición. Cenamos livianito, un poco los nervios..., otro tanto por el temporal de la noche anterior. Recuerdo que el capitán Giachino se lamentó que no hubiera una cámara de fotos para registrar la “última cena”, así lo expresó y nos dijo además, “ – Abran bien los ojos, porque para los que vuelvan esta será la primera vez que estarán en combate real y esa experiencia habrá que transmitirla”. Todavía me sorprenden esa palabras, ahora me parecen premonitorias, no dijo “si volvemos”, dijo “para los que vuelvan”, como si el hubiera estado seguro que no estaría en ese grupo.-
Nos vestimos con los equipos de agua y nos camuflamos las caras de negro, hubo chistes. Dado el color más “criollo” de algunos, le aconsejaban no desperdiciar “la pomada”. A las 22 hs., desde la “toldilla” del Santísima Trinidad comenzamos a embarcar en los botes de goma. En total 21 botes, los cuatro nuestros para la casa del gobernador y el resto debía tomar el cuartel de los “Royal Marines”. Con brazo fuerte los camaradas a bordo nos sujetaban para ayudarnos y a su vez, a modo de saludo..., en voz baja, entrecortada..., ¡ cuídense, vuelvan todos...!.-
Continúa con su relato el “mayor” López : “... – El frío era intenso, la noche una verdadera “boca de lobo”. Ya no tenía dudas, estábamos en camino, los ingleses habían oscurecido totalmente a Puerto Stanley, estábamos a unos tres mil metros de la costa. La nevegación con los botes de goma era difícil, el agua estaba llena de “cachiyuyos” (algas que se desarrollan en las piedras sumergidas) logré llevar nuestro bote sin dificultades, algunos se atrasaban. Nos desorganizamos bastante, llegamos primeros a la playa. Eran exactamente las 00 hs. del 2 de abril. Hicimos el control y vigilancia del perímetro mientras los demás se cambiaban las ropas, luego lo hicimos nosotros. Habíamos desembarcado más al Este de la posición original. Los exploradores que habían salido del submarino “ARA Santa Fe” nos avisaron a tiempo que en el punto original nos estaban esperando.-
No veíamos nada. El capitán Giachino divisó la sombra a lo lejos, de la elevación del cerro “Supper Hill” y dio la orden de dirigirnos hacia él. Desde la cima podríamos tener una mejor visión y ordenar así nuestra marcha hacia el objetivo. Fue un trayecto durísimo, estábamos muy cargados, llenos de municiones y equipo, para colmo las luces de un vehículo que se aproximaba, nos hizo redoblar la marcha. Casi sin aliento, llegamos a la cima. ¡Podíamos ver Puerto Argentino!.-El teniente García Quiroga se había golpeado una rodilla y marchaba con el grupo “Verde” a retaguardia.” .-
 “... – Descendimos hacia el pueblo y el capitán Giachino decidió abordar el objetivo desde la parte trasera. Había una sospechosa quietud. En ese momento comenzamos a escuchar las explosiones y ráfagas provenientes de “Moody Brook”, eran los “anfibios” del capitán Sánchez Sabarots atacando el cuartel de los “Royal Marines”.
En ese momento comenzamos a recibir fuego desde una elevación en la parte trasera de la casa. Contestamos inmediatamente, buscamos cobertura y tratamos de ver de donde venía. Afortunadamente, el inglés disparaba con “trazadoras” y respondimos hacia donde comenzaban los disparos. Era un solo tirador, gritaba números en inglés y cambiaba de posición. Mientras tanto el capitán Giachino, cubriéndose de los disparos se dirigió al frente de la casa del gobernador. A los gritos llamó al teniente García Quiroga que hablaba un perfecto inglés, le pidió que le transmitiera al gobernador la orden de rendirse. El tiroteo aumentaba en intensidad. De golpe quedaron cubiertos por lo que parecía una manta naranja, eran trazadoras, los atacaban desde el pueblo, a través de la cancha de fútbol que estaba frente a la casa del gobernador.”
“... – Para no ser acribillados, el capitán Giachino dio la orden de entrar a la casa. El, García Quiroga, Cardillo, Flores y Ledesma saltaron una verja para llegar a una puerta trasera de la casa. Cardillo la quiso abrir a patadas, no pudo, El capitán Giachino le sacó el seguro a una granada, rompió el vidrio y alcanzó la cerradura, entraron y no vieron nada.

Fue en ese momento, cuando salían, los tiros rebotaban en el cobertizo alrededor de la puerta, Giachino y García Quiroga no dudaron, salieron igual. Ambos fueron abatidos.-
El capitán Giachino recibió un disparo en la región inguinal derecha y en el glúteo del mismo lado. El teniente García Quiroga un impacto en el brazo izquierdo, tres en el tórax, que pasaron por el costado del chaleco antibalas y un quinto, que pegó en el cortaplumas (Victorinox) que llevaba en un estuche de cuero sobre la ingle derecha. Esto le salvaría la vida al impedir que el impacto se incrustara en la arteria femoral.-
El capitán Giachino llamaba al enfermero, el cabo Urbina era enfermero profesional y me estaba ayudando a recargar los cargadores de nuestras armas. Al escucharlo, tomó el bolso con el botiquín y salió para ayudarlos. Se topó con unos ganzos, se sobresaltó y por un instante quedó al descubierto. En ese momento, un golpe en la cintura lo levantó en el aire. Quedó herido y tirado a pocos metros de Giachino y García Quiroga.
Cubriéndome como podía, salí en busca de refuerzos, los “VAOS” del grupo principal de desembarco estaban cerca de la casa del gobernador. El tiempo valía oro, los heridos se desangraban.-
Luego de quedar encajados en la turba, por el peso del anfibio, descendimos y fuimos directo al frente de la casa del gobernador. El grupo del capitán Sánchez Sabarot, había llegado desde “Moody Brook” y nos estaban apoyando. Un “michi” (guardiamarina) que estaba conmigo había apuntado su lanzacohetes a la casa del gobernador. Alcancé a gritarle que no. No podíamos causar bajas. Le dije: mejor apunte al camión que está en la puerta, eso los va a intimidar. Afortunadamente, antes que efectuara el disparo..., vimos un pequeño pañuelo blanco. El gobernador y 42 Royal Marines que lo protegían, habían decidido rendirse. El camión que yo había elegido estaba cargado con minas “antitanque y antipersonal” si lo hubiéramos impactado el daño hubiera sido increíble.-
Eran las 9.15 de la mañana, el gobernador se había rendido. Pasaron tres horas antes que Giachino, García Quiroga y Urbina recibieran atención médica. El capitán Giachino no llegó con vida al hospital de Puerto Argentino. La supervivencia del teniente García Quiroga y del cabo Urbina, merece un libro aparte.”
Jamás los olvidaremos.
Así finalizó su relato el Suboficial Mayor (BT) Pedro C. López, no fue un simple relato, no estaba conmigo en la entrevista, volvió a caminar por Malvinas, junto a la Patrulla TECHO, sus manos, sus gestos, mostraban la sorpresa, el sigilo, el cansancio, la angustia, la tristeza, el orgullo por sus camaradas y por el deber cumplido.-

2 comentarios:

  1. Me "parece" que hay partes "copiadongas" de otro lado y no aparece la referencia.
    ¿Algunas imágenes, podrían agregarse... algún video?

    ResponderEliminar